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AYA, historia de una leyenda

La leyenda de AYA comienza a principios del s. XX, cuando Miguel Aguirre y Nicolás Aranzabal, dos jóvenes armeros de Eibar, por aquel entonces epicentro de la industria armera española, decidieron perfeccionar sus habilidades y conocimientos de la mano de Eduardo Schilling, un exiliado alemán que ejercía su actividad en Barcelona y que gozaba de un prestigio equiparable al de los principales fabricantes de Londres. En 1915, Miguel y Nicolás regresaron a Eibar y fundaron juntos Aguirre y Aranzabal – AYA.
La primera mitad del S. XX fue un poco agitada en España. Sin embargo, para Aguirre y Aranzabal, fue el principio de su desarrollo y crecimiento, hasta convertirse en la marca Española de armas más reconocida.

En 1.938, AYA estaba produciendo una gama de escopetas standard, en su mayoría paralelas, tanto en pletina corta como de pletina entera, así como escopetas de un tiro. Aunque sus productos estaban bien hechos y eran fiables, no eran aún las “mejores” armas de fuego. Eran productos de gama baja media que se vendían a precios competitivos tanto en la exportación como en el mercado interior.

A mediados de los años 1950 se produjo un acontecimiento que iba a cambiar el curso de la historia de AYA: dos hermanos ingleses llegaron a España de vacaciones, y visitaron algunas armerías en Barcelona. Lo que vieron les impresionó y vieron las grandes posibilidades de las escopetas vascas en Gran Bretaña. Provistos con una lista de empresas armeras en el País Vasco, Andrew y Peter King regresaron a España y comenzaron a hacer llamadas. Visitaron a casi todos los fabricantes y todos menos uno tomaron posiciones arrogantes del tipo “tómalo o déjalo”: Esto es lo que hacemos. ¿Cuántas quiere usted? La solitaria excepción fue AYA.

Los hermanos King acordaron ayudar a AYA a producir una “gama Inglesa” de armas específicamente para el mercado británico.

AYA no sólo tenía la fábrica más grande de Eibar, sino que su director comercial, Agustín Aranzabal, fue un magnifico anfitrión para los hermanos King, abierto a escucharles todas sus sugerencia de una posible colaboración en el mercado inglés.

Los hermanos King acordaron ayudar a AYA a producir una “gama Ingles” de armas específicamente para el mercado británico. En esa reunión nació una asociación que ayudó a transformar el negocio español de armas de lujo, y catapultó a AYA de ser una compañía regional conocida principalmente en España, a uno de los grandes nombres de escopetas en todo el mundo.

Los hermanos King regresaron a España con dos armas para AYA para utilizar como patrones. Una era una de pletina entera Holland & Holland y la otra era una pletina corta Westley Richards con la acción standard Anson & Deely. Estos dos armas sirvieron de base para cuatro famosos modelos – el n º 1, la n º 2, la n º 4, y el n º 4 de Luxe. Estas se convirtieron en el centro de la línea de AYA.

Durante la década de 1950, AYA hizo sus primeros esfuerzos para exportar armas a los Estados Unidos. Una de de las escopetas AYA que más éxito tuvo en el mercado norteamericano fue el modelo Matador, un enorme pletina corta fabricada en calibre 12 y 10, que fue vendido en los Estados Unidos durante muchos años. Durante esa década también se produjo el merecido reconocimiento a uno de sus modelos más particulares: el modelo 37, una escopeta de cañones superpuestos con diseño basado en la famosa Merkel que fue calificada en su momento por el coronel Charles Askins, agregado militar de Estaos Unidos en Madrid como «la mejor superpuesta realizada en Europa».

En los años 60 y 70, la industria armera vasca se basaba sobre todo en las escopetas paralelas, salpicada por alguna superpuestas y algún monotiro. La mayoría de las empresas consistían en un puñado de armeros alojados en una pequeña tienda. AYA fue la excepción, con su gran fábrica, 500 empleados, y la producción anual de hasta 20,000 armas de fuego.

En colaboración con ASI se diseño el modelo nº1 “de Luxe”, un arma comparable en calidad y acabado a los mejores armas Inglesas y, sin embargo, venderla a un precio mucho más bajo. La modelo n º 1 “de Luxe” fue una sensación en su presentación.

Desde 1988 la empresa había ampliado constantemente su red de distribuidores y clientes en todo el mundo. Cada distribuidor tenía sus propias ideas de las armas que venderían a sus clientes, y AYA tomó con entusiasmo el hacer variaciones en sus modelos estándar para satisfacer los distintos gustos.

Esta asociación con sus importadores, que comenzó con ASI en la década de 1950 y continúa con todos los importadores en el nuevo milenio, se ha convertido en una piedra angular para AYA de la forma de hacer negocios, y una nueva generación de tiradores y amantes de armas de lujo son los beneficiarios.

Desde 1945, AYA ha fabricado más de 600,000 escopetas de todos los tipos y grados.

AYA mantiene una filosofía basada en la excelencia en el trabajo armera artesano, donde las escopetas son fabricadas y montadas a mano con un tratamiento que eleva cada pieza a la categoría de obra de arte, pero también representa mucho más . AYA está retornando hacia su anterior papel como líder de la industria de fabricación de armas en Eibar. Invirtiendo en maquinaria y tecnología ha conseguido autoabastecerse de piezas para su consumo así como el suministro a otros talleres de la zona
De esta manera, AYA no sólo sigue adelante con a una larga tradición de hacer buenas escopetas, sino que también trabaja para asegurar que la industria armera de Eibar sea prospera en el futuro.
Desde 1945, AYA ha fabricado más de 600,000 escopetas de todos los tipos y grados.
En la actualidad, AYA está centrada en su año del centenario-2.015- y en los retos que se le plantean para el s XXI